Razones y soluciones para el cultivo de cannabis lento

Updated on

enero 15, 2024

¿Notas que tus plantas de marihuana están más para ‘slow motion’ que para ‘fast and furious’? A veces, aunque pongas todo el empeño, parece que crecen con la velocidad de un caracol en día feriado.

Pero no te preocupes, este artículo está aquí para ayudarte a entender las causas y encontrar soluciones para darle ese empujoncito acelerador a tu jardín. Desde semillas caprichosas hasta fiestas de nutrientes que tus plantas no fueron invitadas, te contaré el chisme completo sobre cómo animarlas.

¡Sigue leyendo y convierte tu cultivo en una carrera de velocidad!

Conclusiones clave

  • Las plantas de marihuana pueden crecer lentamente por semillas viejas o de baja calidad. Escoge semillas frescas y buenas para un mejor inicio.
  • La luz es clave. Asegúrate de que tus plantas tengan suficiente luz y del tipo correcto para crecer sanas y fuertes.
  • Vigila el riego. Demasiada agua puede dañar las raíces, así que espera a que el suelo se seque un poco antes de volver a regar.
  • Los nutrientes son comida para tus plantas. Si les falta potasio, calcio o si el pH no es el adecuado, pueden crecer lentas.
  • Protege tus plantas de bichos y enfermedades. Un buen cuidado y atención ayudarán a mantenerlas saludables y a crecer rápido.

¿Qué son las plantas de marihuana y cómo crecen?

Una planta de marihuana vibrante y exuberante en un cuarto de cultivo interior.

Las plantas de marihuana vienen de semillas o esquejes. Si empiezas con semillas, las pones en tierra y esperas a que salgan pequeñas plantitas, eso se llama germinación. Pero si usas esquejes, tomas una parte de una planta y la ayudas a hacer raíces nuevas.

Ambos métodos necesitan suelo, agua y luz para crecer.

Estas plantas pasan por etapas mientras crecen. Primero son plántulas, después vienen las fases vegetativa y de floración. En la vegetativa, la planta se hace grande y fuerte. En la floración, produce los cogollos que la gente recoge.

Para tener una buena cosecha, es importante darles la luz correcta y los nutrientes que necesitan. Y claro, no debes olvidar el agua, ¡pero sin pasarte!

Razones comunes para el crecimiento lento de la marihuana

Plantas de marihuana verde exuberante en un jardín brumoso.

Te has pasado semanas soñando con una cosecha abundante, pero tus pequeñines verdes parecen más interesados en imitar a las tortugas que en dispararse hacia el cielo. ¿Qué está pasando? Pues bien, el crecimiento lento de tus plantas de marihuana puede ser un verdadero quebradero de cabeza, pero también es un misterio que podemos desentrañar juntos.

Desde las semillas que parecen haber hecho un pacto con el tiempo, hasta las hojas que juegan a la escondida con la luz, hay toda una serie de razones por las que tus plantas podrían estar yendo más lento que una caracolada en domingo.

¡Así que ponte tu sombrero de detective y vamos a resolver este enigma botánico!

Semillas de baja calidad o viejas

Las semillas que no son buenas pueden hacer que tus plantitas de marihuana crezcan lento. Si son viejas o malas, tal vez ni empiecen a crecer. Es como cuando juegas a la lotería; si tu boleto es viejo, ya no sirve.

Con las plantas pasa igual, necesitan semillas frescas y fuertes para empezar bien.

Cuida tus semillas como cuidarías un tesoro. Si las dejas mucho tiempo, pierden su magia y ya no quieren crecer. Escoge semillas que sean nuevas y de buena calidad, y verás cómo tus plantas empiezan con mucha energía.

¡Es como darles un súper desayuno para que tengan fuerza todo el día!

Estrés del clon

Clonar tu marihuana puede sonar como un truco mágico, pero ojo, no es solo cortar y plantar. A veces, los clones pasan un mal rato y no crecen rápido. Imagina que es como mudarte a una nueva casa; las plantas necesitan tiempo para acostumbrarse.

Si cortas un trozo de una planta y esperas que eche raíces sin más, puede que se estrese un montón.

Para ayudar a tus clones, piensa en usar hormonas de enraizamiento. Esto les da un empujón para que agarren en la tierra. Pero, hay que cuidarlas mucho. Como los bebés, necesitan un montón de atención y amor para crecer fuertes y sanas.

Y claro, si tus clones están lentos, mira también si hay bichos o enfermedades por ahí. Con cariño y cuidado, tus clones van a salir adelante y crecerán felices y saludables.

Salud de la raíz

Justo después de hablar del estrés del clon, es clave fijarnos en las raíces. Si tus plantas de marihuana crecen lento, mira debajo de la tierra. Las raíces fuertes y sanas son super importantes.

Ayudan a la planta a tomar agua y comida del suelo. Si las raíces están débiles o dañadas, la planta no puede crecer bien.

A veces, la raíz principal no está bien o hay problemas con todo el sistema radicular. Esto hace que la planta esté triste y crezca despacio. Asegúrate de que tus plantitas tengan un buen lugar donde vivir, con tierra que les guste y suficiente espacio para extender sus raíces.

Así podrán ser fuertes y saludables.

Las plantas de cannabis se estiran demasiado

A veces las plantas de marihuana se hacen largas y delgadas. Esto puede pasar si no tienen suficiente luz. Quieren llegar más cerca de la luz y empiezan a estirarse. Pero, ojo, si crecen demasiado pueden caerse.

Si notas que tus plantas están muy altas, es hora de actuar. Puedes utilizar más luces o mover las que tienes más cerca de las plantas. También asegúrate de que no estén muy calientes o frías.

Así las ayudarás a ser fuertes y a no estirarse tanto.

Las plantas no reciben suficiente luz

Si tus plantas de marihuana se estiran, puede ser que no tengan toda la luz que necesitan. La luz es como la comida para las plantas. Si no tienen suficiente, no pueden crecer fuertes y sanas.

A veces, si tus plantas están en un lugar muy oscuro o si la luz que les llega no es la correcta, van a crecer muy lentas o débiles. Es importante darles la cantidad y el tipo de luz que necesitan.

Si notas que tus plantas de marihuana están pálidas o crecen mucho hacia arriba, puedes estar seguro de que necesitan más luz. Para arreglar esto, puedes usar luces especiales para plantas.

Estas luces ayudan a que las plantas crezcan mejor. Pero ten cuidado, también hay que apagar las luces algunas veces, porque las plantas necesitan un tiempo de oscuridad para descansar y poder hacer bien su trabajo de convertir la luz en energía.

Piensa en la luz como un reloj que dice a tus plantas cuándo trabajar y cuándo descansar.

Las plantas reciben demasiada luz

Demasiada luz les hace mal a tus plantitas de marihuana. Imagina que estás en la playa todo el día sin una sombrilla, ¡uf, qué calor! Lo mismo sienten ellas. Si las bombillas de tu cuarto de cultivo son muy potentes o si las dejas mucho tiempo prendidas, tus plantas podrían crecer débiles.

Piénsalo, nadie quiere unas plantas larguiruchas y sin fuerza.

Controla esas luces para que tus plantas estén más felices. Puedes usar un temporizador para que no se pasen de horas bajo la luz. También ayuda mover las luces más lejos de tus plantitas o usar bombillas menos intensas.

Ayudar a tus plantas de marihuana a crecer bien es como darles su espacio personal, pero con luz. ¡No les des un baño de sol que las deje agotaditas!

Espectro de luz incorrecto

Después de hablar sobre cómo demasiada luz puede afectar tus plantas, es clave mencionar que no cualquier luz sirve. Las plantas de marihuana necesitan un tipo especial de luz para crecer bien.

Si usas la luz equivocada, tus plantitas podrían crecer lentas o no como deberían. Imagínate que les das luz para una fiesta en vez de luz para crecer.

Ahora piensa en las luces que usas para tus plantas. ¿Están hechas especialmente para marihuana? Estas luces tienen que tener el espectro correcto. Si no, las plantas se pueden estirar y eso no es bueno para ellas.

Los cultivadores expertos mezclan diferentes luces para hacer feliz a la marihuana. Así que, si tus plantas no están creciendo rápido, echa un vistazo a tus luces. Quizás necesitan un cambio para darle a tus verdes amigos lo que necesitan.

Estrés lumínico: Interrupción del ciclo oscuro

Pasando de la importancia del espectro de luz, es clave hablar del estrés lumínico y cómo puede dañar tus plantas. La marihuana necesita sus momentos de paz y oscuridad. Sin un buen ciclo de noche, las cosas van mal.

Se confunden y pueden parar de florecer. Imagina que no pudieras dormir bien por la noche; no estarías en tu mejor forma, ¿verdad? Bueno, para las plantas es igual.

Tienes que asegurarte de que la luz no entre durante la fase oscura. Ni siquiera un poquito. Ese pequeño rayo de luz puede estresar tus plantas y hacer que crezcan lentas. Piensa en ellas como si fueran personas que necesitan descansar sin interrupciones.

Un cuarto oscuro y tranquilo significa plantas felices y sanas que crecen rápido y fuerte. Y eso es justo lo que quieres, ¿no? ¡Claro que sí!

Riego excesivo

Después de asegurarte de que tus plantas de marihuana tienen el ciclo oscuro correcto, es hora de mirar cuánta agua les das. Darles mucha agua es un error común, especialmente si estás empezando.

Lo creas o no, puedes “ahogar” tus plantas. Sí, como los peces, pero al revés. Si riegas demasiado, las raíces no pueden respirar. Esto puede taparlas y traer problemas graves.

Tienes que encontrar el balance justo. Durante la floración, las plantas quieren más agua y nutrientes. Pero incluso entonces, darles más agua de la que necesitan no es bueno. Si ves que tus plantas no están creciendo como esperabas, fíjate en cómo las riegas.

Puede que necesiten menos agua. También revisa qué tipo de agua usas. El agua de calidad ayuda a tus plantas a estar felices y sanas.

Falta de nutrientes

Pasando del riego, otro problema grande para tus plantitas es la falta de comida, o sea, nutrientes. Si las hojas se ven raras o el crecimiento está lento, puede ser que tus plantas no están recibiendo lo que necesitan.

Cada planta de marihuana es como una persona haciendo ejercicio: necesita comer bien para crecer fuerte y sana. La marihuana pide mucho potasio especialmente durante el florecimiento.

Si no tienen suficiente, ¡puff!, la planta no va a crecer bien. También, si el pH del suelo no está en el punto justo, las plantitas van a tener problemas para comer lo que les das.

Imagínate que tienes un plato de comida delicioso pero no puedes abrir la boca, ¡qué frustración! Pues así se sienten tus plantas si el pH no está bien ajustado.

Deficiencia de calcio

No tener suficiente calcio es otro problema que puede frenar tus plantas. Este mineral es clave para que las plantas de marihuana crezcan fuertes y sanas. Si tus plantas no tienen bastante calcio, podrás ver hojas raras que se curvan hacia abajo y tienen manchas.

Además, este mineral ayuda a las raíces y al crecimiento en general, por lo que sin él, tus plantas pueden ser más débiles y tener más problemas con los bichos y el estrés.

Si descubres que tus plantas de cannabis sufren por falta de calcio, hay cosas que puedes hacer. Asegúrate de que el suelo no esté muy ácido y de que tus plantas pueden tomar todos los nutrientes que necesitan.

Darles un poco más de calcio puede mejorar mucho su salud y hacer que crezcan más rápido. ¡Es como darles una ayuda extra para que puedan llegar a ser plantas adultas felices y llenas de flores!

Nivel de pH incorrecto

Hablando de deficiencias, un gran problema suele ser el nivel de pH incorrecto. Las raíces de tus plantas de marihuana necesitan un pH justo para absorber todos esos buenos nutrientes.

Si el suelo o el agua están muy ácidos o muy alcalinos, las plantas no se alimentan bien. Imagínate queriendo comer una hamburguesa gigante, pero tu boca es demasiado pequeña; así se sienten tus plantitas cuando el pH no está en su punto.

Para mantenerlas felices, apunta a un pH de 6 a 7 si usas tierra. En hidroponía, mantén el pH un poquito más bajo, entre 5.5 y 6.0. Esto ayuda a que las raíces tomen los nutrientes más rápido.

Si notas que tus plantas parecen tristes y no crecen como deberían, chequea el pH. Ajustarlo podría ser justo lo que necesitan para volver a la pista y crecer fuertes y sanas.

Las temperaturas son demasiado bajas o demasiado altas

Las plantas de marihuana son como nosotros, no les gusta ni el frío excesivo ni el calor extremo. Imagina que estás en un lugar muy caluroso o muy frío, ¿verdad que te costaría trabajar o moverte? Bueno, a las plantas también les pasa.

Si hace mucho frío, las raíces pueden congelarse y las hojas crecen lentas. Por otro lado, si el calor es mucho, las plantas se pueden quemar y eso frena su avance. Es clave mantenerlas en una temperatura agradable, entre 22-28°C durante el crecimiento y 20-26°C cuando florecen.

Para lograrlo, hay que estar al tanto del termómetro. Asegúrate de que tu espacio de cultivo esté fresco y bien ventilado para evitar sorpresas con el calor. En tiempos fríos, busca sistemas para calentar un poco el aire alrededor de tus plantas.

¡No dejes que se enfríen! Controlar la temperatura no es solo evitar extremos; es crear el clima perfecto para que tus verdecitas crezcan felices y fuertes.

Las macetas de plantación son demasiado grandes

Una maceta muy grande para tu planta de marihuana puede ser un problema. Imagina las raíces de tu planta intentando llenar un espacio enorme. Esto toma mucho tiempo y energía. Mientras tanto, la parte de arriba de la planta no puede crecer rápido porque toda la fuerza se va a las raíces.

Escoge el tamaño correcto de maceta para tu planta. Si es joven, necesita una más pequeña. Así, las raíces pueden crecer bien y fuertes sin perderse en el espacio. Con el tamaño perfecto, la planta se concentra en crecer hacia arriba y te da más marihuana al final.

¡Es como darle a tu planta una casa del tamaño justo para que sea feliz!

Estrés causado por plagas / enfermedades

Hablando de problemas, las plagas y enfermedades son enemigos silenciosos de tus plantas. Estos bichos malos y los gérmenes pueden hacer que tus marihuanas se sientan muy mal. Imagínate, pequeños insectos chupando la vida de tus hojas o un hongo feo que no deja respirar bien a tu planta.

Es como cuando tú estás enfermo y no tienes ganas de moverte. Así se sienten tus plantas, ¡pobrecitas!

Para mantenerlas felices, debes estar atento y actuar rápido. Usa aceite de neem o jabón insecticida para mandar a esos bichitos a pasear. Y si ves manchas raras o moho, busca ayuda para curar a tus plantas pronto.

Mantén todo limpio y atiende a tus plantitas para que puedan crecer fuertes y sanas, ¡sin estrés!

Estrés causado por daño tisular

A veces, tus plantas de marihuana pueden crecer lento porque están heridas. Esto se llama “estrés por daño tisular“. Puede ser por cortes, roturas o machucones en sus tallos o hojas.

¡Ups! Piensa en ello como si tú te lastimaras un brazo o una pierna. Tu cuerpo necesita tiempo para sanar, ¿verdad? Bueno, a las plantas les pasa lo mismo.

Las heridas en las plantas pueden suceder por accidente cuando trabajamos cerca de ellas o al realizar técnicas de entrenamiento. Si notas que tus plantitas no crecen bien y ves daños en ellas, es hora de actuar con cuidado.

Dale a tus verdes amigas un descanso y trata de no moverlas mucho. Así se recuperarán más rápido y seguirán creciendo sin problemas. ¡Vamos, chicas, ustedes pueden!

Estrés de las técnicas de entrenamiento de cannabis

Entrenar a tus plantas de cannabis puede sonar genial, pero ojo, si no lo haces bien, vas a estresarlas. Hay técnicas como “topping” y “LST” que ayudan a que la planta crezca más fuerte y con más cogollos.

Pero si las aplicas demasiado fuerte o muy seguido, ¡pobre planta! Se puede sentir como si estuviera en una maratón sin fin.

Vamos paso a paso. Si notas que tus plantitas están tristes después de entrenarlas, dale un respiro. Como cuando nosotros nos pasamos de gym y necesitamos descansar. Asegúrate de que tienen todo lo que necesitan: buena luz, agua y nutrientes.

Y no te olvides de hablarles bonito, ¡eso también cuenta! Ahora, hablemos de otro problema que afecta el crecimiento: el estrés por la edad.

Estrés de la edad

Las plantas de marihuana también sienten el paso del tiempo, como nosotros. A veces, crecen despacio porque son viejas. Si una planta es muy vieja, no tiene la misma energía para crecer rápido y fuerte.

Es como cuando las personas se cansan más rápido al ser mayores.

Para ayudar a estas plantas, podríamos usar hormonas de enraizamiento. Esto les da un empujón para seguir creciendo. También es clave asegurarse de que reciban todo lo que necesitan: luz buena, agua y alimentos (nutrientes) que les gusten.

Así, aunque sean más grandes en edad, seguirán estando felices y podrán seguir adelante.

Soluciones para mejorar el crecimiento de la marihuana

Conoce los trucos del oficio para que tus preciadas plantitas se pongan las pilas y crezcan fuertes y vigorosas; te contaré cómo darle ese empujoncito verde que necesitan.. ¡sigue leyendo y transforma tu jardín de marihuana!

Mejora de la iluminación

Tus plantas de marihuana aman la luz. Es como su comida favorita. Necesitan mucha para crecer fuertes y sanas. En la etapa vegetativa, deben tener por lo menos 250W/m² de luz. Si no, podrían crecer lentas o débiles.

Chequea tus luces y asegúrate de que sean suficientes para tus plantitas.

Si tienes lámparas LED dimmable, ¡estás de suerte! Puedes ajustar la luz según lo que necesiten tus plantas. Con estas lámparas, puedes darles más luz en la fase de floración y así ayudarlas a crecer más.

Además, gastarás menos electricidad. Así que es bueno para tus plantas y para tu bolsillo. ¡Ilumina bien tu cultivo de marihuana y mira cómo se ponen felices!

Optimización del riego

Darles la cantidad correcta de agua a las plantas de marihuana es clave. Si echas agua antes de que el suelo se seque un poco, las raíces pueden pudrirse. Imagina que tus plantas tienen sed, pero no quieren beber todo el tiempo.

Es mejor esperar a que el 60% del suelo esté seco. Así las raíces pueden respirar y buscar el agua.

Usa tus dedos para sentir cómo está la tierra. Si los primeros centímetros están secos, es hora de regar. Piensa en la lluvia; no llueve todo el tiempo porque las plantas necesitan tiempo entre lluvias para crecer fuertes.

Dale a tus plantas esa misma oportunidad. Ellas te lo agradecerán creciendo sanas y rápidas.

Control de plagas y enfermedades

Justo después de asegurarte de que tus plantas reciban la cantidad correcta de agua, tienes que protegerlas de bichos y enfermedades. Si ves hojas con manchas raras o bichitos en tus plantas, es hora de actuar.

Usa productos como el aceite de neem para luchar contra los insectos sin dañar a tus plantas. También hay jabones especiales que matan plagas y no son malos para la marihuana.

Mantén tus ojos abiertos para detectar hongos o moho. Estos problemas pueden arruinar tus plantas rápido. Si notas algo extraño, busca ayuda o usa remedios que encuentras en tiendas para jardineros.

Recuerda que un buen cuidado previene muchos problemas con las plagas y las enfermedades. Así tus plantas pueden crecer fuertes y sanas.

Corrección del pH y nutrientes

Tus plantas de marihuana necesitan un suelo con el pH justo. Si es demasiado alto o bajo, las raíces no pueden tomar los nutrientes bien. Asegúrate de que el agua o solución para tus plantas tenga un pH entre 6.5 y 7.0.

Usa tiras de prueba o un medidor de pH para revisarlo. Si el pH no es el correcto, usa productos especiales para subirlo o bajarlo.

No olvides que las plantas también necesitan nutrientes balanceados. Demasiado de algo y tus plantas se pueden enfermar. Algunas veces, las plantas tienen nutrientes bloqueados porque hay muchas sales en el suelo.

Para evitar esto, dale a tus plantas una mezcla buena de comida para plantas con todos los nutrientes que necesitan, como potasio. El potasio es muy importante para que la planta crezca fuerte y sana.

Ahora, después de cuidar el pH y los nutrientes, hablemos del uso de técnicas de entrenamiento adecuadas para tus plantas.

Uso de técnicas de entrenamiento adecuadas

A veces, tus plantas de marihuana no crecen porque las formas en que las cuidas son muy fuertes para ellas. Si haces técnicas como el topping o el supercropping, las plantas pueden estresarse.

Pero hay maneras de entrenarlas que no las lastiman tanto. Una manera es el entrenamiento de bajo estrés, que es doblar suavemente las plantas para cambiar cómo crecen. Este truco ayuda a que tus plantas se hagan más fuertes y tengan más flores.

Si usas estas maneras más suaves con tus plantas, verás cómo mejoran. Vas a necesitar paciencia, pero poco a poco, las plantas responderán y te darán más marihuana. Además, siempre debes asegurarte de que la luz, el agua y los nutrientes sean los correctos para ellas.

Y ahora, hablemos de cómo los factores económicos afectan al cultivo de la marihuana.

Factores Económicos en el Cultivo de Marihuana: Precio y Rendimiento

El cultivo de marihuana puede ser costoso, y lo que gastes puede afectar cómo crecen tus plantas. Si inviertes en semillas de alta calidad, es más probable que tus plantas crezcan fuertes y saludables.

Pero, si escoges semillas baratas o viejas para ahorrar dinero, es posible que no crezcan tan bien. También, el precio de la luz y los fertilizantes importa mucho. Luces potentes y nutrientes buenos pueden hacer que tus plantas de marihuana den más flores.

Pero, si gastas menos en luces débiles y nutrientes de baja calidad, tus plantas podrían crecer lentamente.

Los rendimientos también cuentan una gran historia económica. Si cuidas bien tus plantas y evitas problemas como plagas y enfermedades, podrías terminar con una cosecha grande. Esto significa que podrías ganar más dinero si planeas vender.

Pero si tus plantas están enfermas o no reciben lo que necesitan, tendrás menos producto al final. Esto puede hacerte perder dinero. Ahora, hablemos sobre cómo mejorar el crecimiento de tu marihuana..

Conclusión

Crecer marihuana no es siempre fácil, ¿verdad? Pero, oye, no te preocupes. Ahora sabes un montón de cosas que pueden ayudar a tus plantas. Recuerda chequear la luz, el agua y los nutrientes.

Y si algo anda mal, ¡pues a arreglarlo! Con cariño y atención, tus plantitas pueden crecer fuertes y saludables. ¡Ánimo y a cultivar!

Descubre más sobre cómo los factores económicos influyen en el cultivo y rendimiento de tu plantación consultando nuestra guía completa aquí.

Preguntas Frecuentes

1. ¿Cómo sé si mis plantas de marihuana tienen falta de nutrientes?

Si tus plantas de marihuana crecen lento, tal vez les falten nutrientes. Ojo, las hojas suelen ponerse amarillas o pálidas cuando esto pasa. Asegúrate de darles comida buena y balanceada, ¡como a ti te gusta!

2. ¿Qué pasa si mis semillas de cannabis o esquejes tienen estrés?

Bueno, si empezaste con semillas de baja calidad o tus esquejes sufrieron estrés, tus plantitas podrían tardar en agarrar fuerza. Dale tiempo y amor, usa hormona de enraizamiento para ayudarles a echar raíces fuertes, y verás cómo levantan.

3. ¿Mis plantas pueden crecer lentas por pestes o enfermedades?

¡Claro que sí! Si notas bichos raros o manchas en las hojas, es posible que tengas pestes o enfermedades. Pero no te rindas, un poquito de aceite de neem puede ser justo lo que necesiten tus plantas para volver a estar sanas y fuertes.

4. ¿Influye la luz en el crecimiento lento durante la fase de floración?

¡Totalmente! Si no reciben suficiente luz, tus plantas de marihuana pueden crecer más lento, sobre todo en la fase de floración. Asegúrate de que tienen luz suficiente con unas buenas lámparas de cultivo—como darles su propio solcito personal.